19 jul 2011

UY QUE MIEDO, Y QUE MAMADAS!!

Últimamente he estado viendo películas de terror (la neta confieso que soy bien culo) y de tanto exponerme a este género he sacado algunas conclusiones de lo absurdas que son algunas de sus escenas y/o personajes. A continuación les explicaré algunas.

Entiendo que la calentura es muy cabrona (sí, lo sé) pero el director debe de estar muy enfermo para que ponga a unos weyes tirando pasión a plena luna llena, alejados de la ciudad y pa’ acabarla de chingar a orillas de un lago donde en los años 50’s un morro se ahogó, obvio está que se los van a chingar en pleno mete-y-saca.


Otra mamada es la de los weyes que a mitad del bosque se les pierde uno del grupo y la mejor idea que se le ocurre a uno de ellos es “vayamos a buscarlos, Stacy y Joanna vayan por allá, Tom y yo iremos por acá”, ¿a quién pitos se le ocurre separarse? (Por cierto las morras están bien buenas y van al bosque en shortcitos en pleno noviembre)


También está el adolescente jugador de americano (mariscal, no cualquier mamada) que se siente el más chingón del mundo, pero termina llorando de lo culeado al ver a sus compañeros morir de uno por uno.


A eso sí, de ese grupito de chavos “reventados” siempre hay alguien que extrañamente no encaja, pero es él quien comienza a atar cabos de lo que sucede de acuerdo a que conoce la historia y la vincula con factores ambientales, sí, es el que piensan… el nerd! Sí claro, el bullyng es algo moderno y antes no existía, Ajá.

Así que ya saben, si van al bosque tomen las siguientes medidas:

  1. No se pierdan por nada del mundo o serán los primeros en morir.
  2. No te hagas el pinche boyscout y quieras armar una misión de rescate, solo lograrás que los chinguen a todos.
  3. Sí traes ganas de coger, pues aguántate, nadie se ha muerto por no coger.
  4. Si eres mujer y estás bien rica, usa short en invierno, si te toca te toca. :D
  5. Si te dicen “aquí quédate”. Hazle caso al cabrón, no te pinches muevas aunque te andes cagando.
  6. Último y más importante, llévate al nerd del salón, a veces sirven de algo. (No es cierto, es broma)

17 jul 2011

NO ERES TÚ, SOY YO

¿Bueno cómo empezar? No sé, se me ocurre emprender este viaje por la parte central de lo que quiero compartir con ustedes mis lectores (pocos y con el suficiente tiempo libre como para leer esta reflexión), el centro de esto será “NO ERES TÚ, SOY YO”, una de las mentiras más utilizadas, y me atrevo a decir que compite con las clásicas: “Nada más la puntita”, “No te va a doler” o “He leído los términos y acepto las condiciones”; Sin embargo, el hecho de que yo no considere a ésta como una mentira es porque efectivamente “no eres tú”, no eres esa persona que él o ella busca para seguir su camino juntos y tomados de la mano por el sendero del amor (Mmm creo que exageré un poco), no eres ese Ken® o esa modelo a la que dicha persona le imprimió cierta personalidad que se inventó en su niñez. Y puede ser que él o ella nunca la encuentren. (Ojalá haha)


Continuemos con la segunda parte: “SOY YO”. Aquí es donde más tardé en estructurar mis pensamientos (Obvio, si no lo haces constantemente pierdes la habilidad), pero al fin deduje lo siguiente: Es él o ella quien se perderá de tu compañía, es él o ella quien quizá no sabe lo que quiere, o la más fría pero quizá la más certera es que hay alguien más que le ha llamado la atención y pues decidió decírtelo de esta forma:

“NO ERES TÚ, SOY YO”